El General es un documental que debería ser incluido en los planes de educación, por lo menos desde bachillerato, sino es que desde secundaria.
Con elementos esenciales, como amarrar la cámara de video al frente del vehículo de vendedores ambulantes; una extraodinaria selección de películas de Elia Kazan, Fernando de Fuentes, Sergei Eisenstein, y una grabación que aporta un mínimo asidero para hilar una historia, la bisnieta del fundador del PRI no sólo nos pone al tanto de la historia que definió a México en el Siglo XX, además con voz de tono imparcial y sensibilidad extraodinaria nos pone a pensar cual es el México que queremos para la posteridad, el de la sangre derramada por Elías Calles o el de la inteligencia y la estrategia de Lázaro Cárdenas.
No en balde Robert Redford, a través del Instituto Sundance, patrocina esta obra maestra del documentalismo mexicano, dirigida, como debía ser, por una mujer. Sólo una "ella" podía compartirnos esa historia con sensibilidad, nostalgia, amor por la familia, humor y profundo contraste entre la Revolución soñada y la revolución fracasada.
Si la película Todo el Poder, jugó un papel central para echar al PRI en el 2000, El General podría evitar que regrese en el 2012. Así de poderosa. Así de importante.
Bastan dos escenas para dar muestra de la inteligencia de Natalia Almada: La de la quema de monjas, como brutal venganza de reprimidos sexuales y la de la ceremonia luctuosa en las patas adyacentes del Monumento de la Revolución, una en la que yacen los restos de Lázaro Cárdenas, la otra en la que se encuentran los de Plutarco, el hombre que usó la máxima crueldad atribuida a los turcos, uno de los apodos que le dieron en su época.
Aun existe la leyenda de los barcos con chinos que habría mandado hundir Elías Calles para despojarlos de sus bienes, una vez expulsados de sus bien ganadas propiedades en Sonora. Ahí están las imágenes de la Santa Inquisición callista, quemando vivas a personas reales, mientras permanecían impunes los jerarcas católicos que Hidalgo y Morelos no pudieron vencer. A un siglo de la Independencia seguían pretendiendo gobernar a México ¿pero eso justificaba la quema de monjas y el fusilamiento de sacerdotes?
El General no resuelve si Toral fue el único en disparar sobre Obregón. Es un mito que persiste, cono el del asesino solitario que disparó sobre Colosio. Tampoco puede comprobar que el grupo Sonora, encabezado por Calles, ordenó los asesinatos de Villa y Carranza, pero si plantea hechos que nos pueden permitir suponerlo.
Parece que después de todo Calles sí hará algo digno por México: haber sido el origen de una dinastía que nos ha dado a la mejor directora de cine hasta el momento, Doña Natalia Almada, la mejor documentalista del centenario de la Revolución y cuya obra El General, alcanzamos a conocer antes de que terminara de acabar el centenario de 1910.
En justicia, no se debe dejar de mencionar a Gael García y Diego Luna, creadores de Ambulante, por su labor en favor del documental mexicano, ellos deberán ser nombrados en el 2110, como artíficies de la segunda revolución en México, esta de cultura e ideas.
» ¡Viva Zapata! ( 1952 ) |
Para ver más:
http://www.youtube.com/watch?v=5burKG4O45Q
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