viernes, 19 de agosto de 2011

Teatro Gratis y de lujo en la UNAM

Idiotas contemplando la nieve

<>
 
<>






Los alumnos de la generación 2007-2011 se titulan con una obra que refleja un momento más o menos común en la vida de cualquier persona: aquél en el que, tras hacer una pausa en el centro del ajetreo existencial, aparece la pregunta: ¿qué estoy haciendo? La obra se presenta en el Foro del CUT a partir del 19 de agosto a las 18:00 horas, todos los viernes, sábados y domingos hasta diciembre

En medio del frenético ritmo de la contemporaneidad, agitado hasta la histeria por la vida aspiracional, llega un momento donde todo se detiene y aparece una pregunta: "¿qué estoy haciendo?". Como un retrato de ese instante, los alumnos de la generación 2007-2011 del Centro Universitario de Teatro presentan Idiotas contemplando la nieve, de Alejandro Ricaño.

De acuerdo con Boris Schoemann, director de la puesta en escena, se trata de "una deliciosa comedia amarga y agridulce que retrata muy bien la estupidez de los tiempos consumistas que vivimos".
Para el director, si bien en las escuelas de teatro se estudia a los clásicos, se aborda poco a los autores contemporáneos. Por ello, cuando recibió la invitación para dirigir la obra con la que se titularía esta generación, comenzó un proceso que incluyó un taller de dramaturgia mexicana contemporánea, donde los estudiantes conocieron a los autores más inquietantes de la escena actual y seleccionaron esta pieza.

La obra, explicó en entrevista, presenta personajes comunes y corrientes con anhelos distintos que, al tratar de alcanzarlos, van tejiendo una comedia donde las historias entrecruzadas, como es común en el cine y teatro contemporáneos, generan una serie de acontecimientos irreversibles que alcanzan la histeria.

"Esta metáfora de idiotas contemplando la nieve es el detenerse un poco en ese momento de la histeria y decir ‘¿qué estoy haciendo?' (...) Es una obra que tiene un tono muy cómico pero a la vez es muy patética. Intentamos jugar en el filo de esos dos tonos (...). Que te rías de las cosas estúpidas que cometen los personajes, pero que finalmente todos estamos cometiendo".

Por ejemplo, en la historia aparece una diputada cuyas prácticas admiran y recuerdan muchos ejemplos de la realidad nacional; hay también una señora a quien le va la vida en su anhelo de comprarse una cafetera de 24 mil pesos; un cura pederasta que se encuentra con su deseo; una mujer deprimida porque sus vecinas tienen baños mejores que el suyo y hace, por ello, cosas inverosímiles.
"Muchos personajes se mueren en esta obra, pero no es nada del otro mundo, ni para cortarse las venas, es lo patético de las situaciones y los comportamientos humanos", aclaró Schoemann.

Sobre su obra, escribe Alejandro Ricaño: "Es una verdad dolorosa, ignoramos que estamos jodidos. Si hasta hace algunas décadas el mundo burgués era inaccesible, los planes de crédito nos dieron un disfraz para pasar desapercibidos (...) Desde entonces, me imagino, cometemos estupideces para satisfacer necesidades absurdas, con la esperanza de que un día sea suficiente, que un día nos sintamos plenos. Pero evitemos el suspenso, de sobra sabemos que no será así".

Maduración escénica

Regresar al CUT tiene un significado especial para el director. Lo primero que hizo al llegar al DF en 1999 fue dirigir una puesta en este espacio universitario: Los endebles. A partir de ello, conformó una compañía con el mismo nombre que ha sido una oportunidad de formación profesional para varias generaciones de actores en el teatro La Capilla.

Así, dirigir la obra con la que se titula una nueva generación de actores representa un lujo y a la vez un reto. "No estás dirigiendo únicamente, necesitas cuajar lo que aprendieron de tantos maestros, de tantas cosas que hicieron. Hacer un trabajo propio de creación de personaje muy fino acumulando sus capacidades".

En ese sentido, destacó las cualidades del grupo, que se caracteriza por ser propositivo. Entre ellos se cuentan algunos músicos y, de hecho, compusieron la música del espectáculo y la tocan en vivo.
Debido a las dificultades intrínsecas de la comedia, era importante explotar las capacidades histriónicas y cómicas de los actores, pero también de la contención de éstas al buscar la verosimilitud. Además, coordinar en escena el movimiento de 14 actores, lo que requiere gran precisión.

Para el director, un interesante reto en el montaje de la obra ha sido ver cómo los personajes se narran a sí mismos sin necesidad de narradores externos a la historia, lo cual crea un nivel de distanciamiento y dificultad mayor.

"Tienen que vivir su narración de tal manera que veamos el problema en el cual están realmente y que nos sintamos reflejados finalmente en ellos porque ese tipo de situaciones nos han pasado a todos. Trabajar la narración escénica es algo importantísimo que aporta al actor otras cosas además de la pura escena escrita dialogada. La dramaturgia de Ricaño mezcla completa y abruptamente la narración escénica y el diálogo abierto".

Las historias y sensaciones de los personajes se reflejan en el propio ritmo de la obra, dividida en escenas cortas que los muestran en situaciones cada vez de mayor encono y frente a decisiones más drásticas y absurdas.

Ésta es apenas la segunda ocasión que se monta esta pieza teatral. ¿Cuál es el sello de la dirección de Schoemann? Para el director se trata del tono: "Yo tengo una visión un poco más patética de la obra. Tal vez el público se ría menos, pero se ría más amargo. Espero. Tal vez no se van a reír. Ya veremos".

Los alumnos que actúan en esta puesta, integrantes de la generación 2007-2011 del CUT, son: Ana Belén Aguilar, Intel Aparicio, Pedro de Tavira Egurrola, Axel García, Rodrigo León, Carlos Alejandro Tavera, Adryana Marroquín, Génesis Orgaz, Elizabeth Pedroza, Sergio Rüed, José Juan Sánchez. Sofía Sylwin, Édgar Valadez y Emiliano Yáñez de la Mora.

Elige tu concierto, gratis o de paga

Debuta orquesta juvenil de la UNAM

<>
<>
PDFPRINTEMAIL
Publicado en 2011-08-16




Dirigida por el mexicano Rodrigo Macías, la Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata tendrá la tarea de sensibilizar a la comunidad universitaria, acercándola de forma sistemática, pero natural y cotidiana a la música de concierto

La Universidad Nacional Autónoma de México, a través de la Dirección General de Música, ha fundado la Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata. El ensamble, que estará a cargo del joven director Rodrigo Macías, ha sido creado con el fin de atender a la comunidad estudiantil de manera directa y versátil, acercando a este sector de forma sistemática, pero natural y cotidiana, a la música de concierto.
Las presentaciones de la recién formada Orquesta Juvenil Universitaria Eduardo Mata formarán parte de un proyecto en donde se visitarán diversos recintos, dentro y fuera de la Universidad.
Conformada en su totalidad por jóvenes músicos no mayores de 35 años (profesionales y estudiantes), la Orquesta será el vehículo ideal para acercar al sector más joven de la comunidad universitaria, pues la cercanía generacional con este público hará que su identificación sea inmediata y espontánea. Parte fundamental del proyecto será el desarrollo de los nuevos talentos mexicanos, que actuando al lado de músicos profesionales, estarán preparados para renovar las orquestas profesionales en el futuro.
La actividad artística de la agrupación abarcará todos los géneros musicales y pondrá especial énfasis en aquellos que se muestren más atractivos para los jóvenes, pero siempre sin sacrificar la excelencia artística; para ello se contará también con directores huéspedes y solistas del más alto nivel, ya sea en el ámbito clásico o en el popular.
Rodrigo Macías es fundador y director de la Orquesta de Texcoco, con la que ha realizado estrenos de compositores mexicanos y ha trabajado con solistas como Maria Grazia Bellochio, Eva María Zuk, Mauricio Náder, Jorge Lagunes, José Luis Duval y Dante Alcalá. Se ha presentado con las principales orquestas del país. En 2004 tuvo su primera actuación en Europa con el Divertimento Ensemble de Italia y en 2007, participó en el Festival Internacional Cervantino con la Camerata del Desierto. En 2008 fue designado director asistente de la Orquesta Filarmónica de la UNAM. Desde 2010 es director titular de la Orquesta Sinfónica Juvenil del Estado de México.
Las presentaciones del ensamble iniciarán con un concierto el domingo 21 de agosto a las 18:00 horas en la Sala Nezahualcóyotl. Continuarán el lunes 22 a las 11:00 horas en la Facultad de Medicina, el martes 23 a las 13:00 horas en la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, el miércoles 24 a las 13:00 horas en la Facultad de Arquitectura, el jueves 25 a las 18:00 horas en la FES Acatlán y, finalmente, el sábado 27 a las 12:00 horas en el Anfiteatro Simón Bolívar del Antiguo Colegio de San Ildefonso. Los conciertos serán entrada libre, excepto en la Sala Nezahualcóyotl ($120.00, $100.00 y $60.00) y en el Anfiteatro Simón Bolívar ($50.00).
El programa de las presentaciones estará integrado por Adagio de Albinoni, Entrada de la reina de Saba de Händel, Las ruinas de Atenas (fragmento) de Beethoven, Marcha Pompa y circunstancia no. 1 de Elgar, Danzas húngaras no. 5 y no. 7 de Brahms, Intermezzo de La boda de Luis Alonso de Gerónimo Giménez y música de las películas El señor de los anillos de Howard Shore y La guerra de las galaxias y Harry Potter de John Williams.
Boletín Música UNAM

Una kathedra en un minuto

Código

¿Quiéres un anuncio como este aquí, escribe a ioninsurgentes@gmail.com

Entradas populares del mes

Cartelera DVD

Otros artículos que pueden gustarte

Búsquedas personalizadas

Búsqueda personalizada

Seguimiento de Ad Sense

Un libro indispensable

Un libro indispensable
que nos cuenta detalles de la guerra del PRI contra la sociedad civil

Entradas populares