lunes, 14 de julio de 2008

El Super Agente 86, Get Smart

Imagen de Steve Carell, Protagonista de la versión fílmica del Super Agente 86




No es poco común que las series de televisión que nos encantaban en nuestra niñez o juventud, resulten decepcionantes a la hora que pasan al cine. Algo de eso les sucedió a muchos de los espectadores de Los Picapiedra, Meteoro y Perdidos en el Espacio. Tal vez se deba a que no nos convencen cuando se adaptan al formato de cine, quizá porque la anécdota no da para tanto o tal vez por lo contrario, pierden emoción al no existir la expectativa del capítulo siguiente. Afortunadamente esto no ocurre con el Súper Agente 86, dirigido por Peter Segal.




Tal vez en este caso la transformación resulta más afortunada porque no se trata de la adaptación de un dibujo animado; como Estados Unidos ya tuvo en George Bush a un personaje de caricatura como presidente, lo que resulta divertido es que en El Súper Agente 86 no necesitan hacer una sátira de la Agencia Central de Inteligencia o del jefe de gobierno de su Nación, basta con retratarlos.


Recapitulemos: En la serie de 1965, Control es la super secreta agencia que mantiene a salvo al "Mundo Libre" de las travesuras de Kaos, una organización soviéticoalemana que intenta calentar la guerra fría.


El Agente 86 de la serie de televisión es un tipo torpe, pero con una suerte increíble que lo hace uno de los más efectivos.


En la película, por el contrario, el agente interpretado por Steve Carrel de veras es un tipo listo, que está detrás de la investigación y el trabajo burocrático. Es lo que se conoce como un Nerd y los otros agentes lo desprecian porque es demasiado escrupuloso, detallista y porque considera que para vencer al enemigo no siempre importa la fuerza bruta, sino el conocimiento de sus debilidades afectivas.


Carrel, quien fue un convincente Virgen a los 40 años y la voz del gentil elefante Horton, en el mundo de los Quien también resulta muy simpático en este papel de un agente de gobierno más bueno que tonto.


Los chistes políticos son de lo mejor. Tal es el caso de cuando alguien afirma que el Presidente debe estar haciendo algo importantísimo, cuando un niño de cinco años le está asegurando con gran espontaneidad que no serviría ni para maestro de un kinder.


Luego de una introducción que arranca carcajadas a los espectadores, el filme parece desviarse a la película estilo "James Bond", pero no habría que reprocharselo porque se requiere alternar situaciones para que cuando llegue la broma volvamos a disfrutarla.


Peter Segal, de la misma edad de su protagonista, dirige a Carrel de manera que se nota una muy buena química entre ellos, se percibe una película en la que se divirtieron y que por ende nos divierte. Segal tiene entre sus antecedentes como director la versión moderna de Golpe Bajo.


La gracia de Anne Hathaway, la moderna princesa de las películas de Disney y protagonista de El Diablo Viste de Prada, no desmerece en comparación de su belleza como la Agente 99, papel que en la tele interpretó Barbara Feldon.


Dwaine Johnson, quien era más luchador que actor cuando filmó La Momia, con el seudónimo de The Rock, Terence Stamp, Alan Arkin y James Caan - quien tiene el lujo de burlarse del Presidente- más un cameo de Bill Murray como el Agente 13, cuya misión es esconderse en los lugares más increibles, complementan el reparto.


Lejos de decepcionarnos, tenemos la oportunidad de ver de otra manera secuencias como la que acompañaba los créditos de la serie de televisión


Pero quizá lo mas sorprendente es que el único actor que pudo darse el lujo de repetir en Cine lo que hizo en televisión 30 años atrás, es mexicano, Jorge Arvizu, quien vuelve a prestar su voz en el doblaje a Maxwell Smart. Aunque sólo fuera por esto, habría que celebrar la vuelta de uno de los mejores productos en la historia de Hollywood.
Un dato interesante, Steve Carrel y Alan Arkin ya habían trabajado juntos en una película independiente, Little Miss Sunshine, el primero como un homosexual deprimido por el "closet" y el segundo como un abuelo ye-ye.
Quizá si no hubieran estado juntos en esa producción independiente, nunca les habría llegado el éxito comercial y de crítica obtenido en el Super Agente 86. El Cine tiene misteriosos caminos para quien se porta bien y no rehusa papeles pequeños


Obama, el racismo y Memín Pinguin




Nota del editor de CarteleraDF:
El Estado Republicano de Texas prohibió la difusión de una historieta de Memin, porque se alude a una campaña presidencial del personaje de ficción.
Tal parece que les dió temor que esta historieta influyera en favor del candidato mulato Barack Obama y prefirieron tildar al dibujo de Sixto Valencia como "Racista", lo que por cierto no ocurre por primera vez.
La noticia dio pie a una nueva entrevista con el más reconocido dibujante mexicano de todos los tiempos, Sixto Valencia, quien junto con don Gabriel Vargas tienen pendiente un gran homenaje nacional por ser iconos de la cultura popular.
El Blog peruano La Nuez, especializado en historietas realizó una estupenda entrevista al respecto por lo que nos permitimos incluir aquí un enlace como homenaje a sendos personajes de la cultura popular mexicana, tanto el personaje, como el autor de su dibujo.

Don Sixto Valencia, el dibujante de Memín Pinguín en medio de la batahola que se ha levantado en EEUU por las denuncias de racismo en contra de este popular y reconocido personaje latinoamericano, se da un tiempo para contestar nuestras preguntas en exclusiva para Perú.

¿Estimado don Sixto es inevitable referirse a este nuevo escándalo de un supuesto racismo contenido en el personaje de Memín, que es lo que piensa y siente en este momento?

Bueno, lo mas importante es que el personaje está vigente y no pasa inadvertido el dibujo. Espero que gane las elecciones Obama para que se acabe el racismo en Estados Unidos ya que es donde se presenta con mayor frecuencia esta diferencia entre, culturas, razas, clases sociales y de cualquier origen.
¿Qué pensó cuando la misma Casa Blanca, salió a declarar que el personaje contenía “estereotipos raciales ofensivos”?
Que a mí me dio risa, porque realmente mi preocupación eterna fue hacer simpático y bonito a Memín, que aquellos que han mencionado como a Memín como racista tienen una total ignorancia acerca de nuestra cultura popular mexicana. Además como dibujante te tienes que documentar para darle el parecido, tienes que ver como son los rasgos de un niño africano, por lo que tuve que recurrir a los negritos como Ebony del Sprit y otros más.

¿Cómo recuerda la época histórica en que apareció por vez primera Memín Pinguín?

Tengo muy buenos recuerdos, eran los años sesentas aún yo era joven y hermoso. Fue muy emocionante saber que la revista en su primer número había alcanzado una venta inimaginable, era una época en que la gente en México se entregaba a la lectura no había competencia con la televisión, además el contenido de las historias y aventuras de Memín era muy blanco y resaltaba mucho los valores; como el amor, la amistad, el compañerismo, la lealtad, etcétera.

¿Se guió mucho o poco del diseño precedente de Alberto Cabrera ?

Bueno sí, al principio el personaje es el mismo con las características que solicitaba la Sra. Yolanda, empecé a dibujar a Memín como lo dibujó Alberto Cabrera, pero era un negrito muy feo, realmente Memín se transformó con el tiempo y tuvo su estilo propio adquiriendo la apariencia que ahora todos conocen y recuerdan.

¿Cómo se llega a constituir la apariencia de Memín? ¿Tenía alguna referencia en mente?

Mira la Sra. Yolanda Vargas, la autora, hacía dueto con su hermana y cantaban, o bueno eso es lo que ella decía, un día estando de gira en Cuba, quedó prendada de los niños cubanos y así surgió el personaje. Cuando escribió Almas de niño, que se editaba en la revista Chamaco en los años cincuentas la idea fue dibujar un niño negrito con rasgos caricaturescos a diferencia del resto de los personajes. La Sra. Yolanda lo describía, como un niño chaparro, calvo, de orejas prominentes, bembón y con ojos de plato.

¿Que tiempo le llevaba realizar una historieta completa?
La revista se publicaba semanalmente, tenía que hacer un episodio de 32 láminas de 4 a 6 cuadros cada una, para completar este trabajo lo realizaba haciendo 5 cartones por día, además de que también se hacía la portada. En la primera edición se hizo en medio tono con la portada a color, pero la reedición que se hizo en los años ochentas se volvió hacer cuadro por cuadro, todos los cartones con todo y portadas, es la serie que se está reeditando actualmente.

Nota: Si deseas leer más por favor sigue el enlace a la publicación original http://lanuez.blogspot.com/2008/07/lanuez-entrevista-don-sixto-valencia-el.html

Una kathedra en un minuto

Código

¿Quiéres un anuncio como este aquí, escribe a ioninsurgentes@gmail.com

Entradas populares del mes

Cartelera DVD

Otros artículos que pueden gustarte

Búsquedas personalizadas

Búsqueda personalizada

Seguimiento de Ad Sense

Un libro indispensable

Un libro indispensable
que nos cuenta detalles de la guerra del PRI contra la sociedad civil

Entradas populares