Tierra, Fuego, Aire y Agua.
Precisamente en ese orden.
Precisamente en ese orden.
Los cuatro elementos más básicos, los más antiguamente clasificados, son más que escenografía, protegonistas de una puesta en escena, donde junto con ellos somos los estelares de una representación...no, está mucho mejor dicho de una vivencia, el renacimiento de nosotros mismos.
La tierra es el vientre, pero para los no iniciados, no es un lugar tibio y acogedor, es casi una antesala del infierno, el calor asciende y puede volverse casi insoportable, sofocante, asfixiante; pero hay una salida de emergencia sin traspasar la puerta, sin el temor de quedar en ridículo con nuestros compañeros de renacimiento, pegar la cabeza al piso.
El calor sube, literalmente asciende, entra con fuerza violenta por nuestros poros y expulsa muchos de nuestros males. Lo dice la física clásica: dos cuerpos no pueden ocupar el mismo lugar en el espacio, el agua es el solvente universal, entra en forma de vapor por nuestros poros, combinado con la esencia de las plantas que ha elegido la temazcalcihuatl, la mujer del Temazcal, la alumna de docenas de mujeres que han heredado un conocimiento casi perdido en más de 500 años de fusión de la cultura europea y la americana.
Cuando entra el vapor casi hirviendo, nuestro cuerpo expulsa asi mismo parte del agua. Somos 70 por ciento de agua, pero esta no sale sola, es como un submarino en la que se transportan al exterior quien sabe cuantas toxinas, seguramente también mucha grasa.
Es física y, medicina hipocrática. De acuerdo a las más antiguas investigaciones griegas, estamos hechos de humores. Cada cuerpo emana algo, puede ser bueno o malo, lo que va a entrar en nosotros va a permitir que predominen los buenos humores, sobre los malos.
Su nombre civil es Norma, pero es lo menos importante, ella prefiere ser la mujer estrella que nos guiá en el temazcal. Ella ama lo que hace, tiene la experiencia para conducirnos en un viaje dantesco, del quemante infierno al vientre tibio y al agua preciosa y al oxígeno vital.
Es una experiencia en la que literalmente renacemos, pero no sólo fisicamente, si lo queremos, también emocional y espiritualmente.
Habrá cantos y mantras para sacar nuestra fuerza, nuestra energía, nuestro miedo y nuestra desesperación.
En la experiencia que nosotros vivimos había tres mujeres y dos hombres dentro del temazcal. Para el autor de estas líneas no podía ser de una mejor manera, de otra forma no se habría logrado ese equilibrio energético, esa experiencia revitalizadora o para decirlo de otra manera, es muy probable qjue no hubiera podido llegar al final de esa experiencia que pudo haber sido aterradora, pero que al final se convirtió en un rito de renovación incomparable.
Quizá haya otros métodos. El yoga, por ejemplo, la meditación pero ¿cuanto tiempo debemos esperar a que nuestro cuerpo sea lo suficientemente ágil para hacer ciertas posturas o para tener un control mental que nos permita transformar nuestro entorno físico?
Llamarle abuelas a las piedras, puede sonar absurdo para quienes estamos educados en la clasificación de un reino mineral, otro vegetal y uno animal. Según nos dijeron solo los dos últimos representan a la vida.
¿Pero de donde salen los vegetales y frutos con los que nos alimentamos y que comparten gran parte del código genétic con los humanos? ¿No es precisamente de la tierra?
Investigaciones muy recientes nos han dado a conocer que el disfrute de la sexualidad tiene mucho que ver con el óxido nítrico, eso es lo que contienen los medicamentos para la disfunción eréctil y la anorgasmia. Pues bien, esta molécula la produce un aminoacido llamado Arginina, cuyo precursor está contenido en productos que salen de lo profundo de la tierra, como el betabel.
No hay estudios aun, que lo certifiquen, pero esto puede ser la causa de las propiedades afrodisiacas del pulque ¿será la fermentación la que produce estos gases o viene desde el agave?
No abundaremos en la disgresión, pero valga para hacer más comprensible esta relación entre los elementos que se fusionan en el temazcal.
Al salir del horno aun no termina la experiencia. Nuestro cuerpo está preparado para que llegue más oxígeno al cerebro. Ahora nos hemos relajado. La temazcalcihuatl, que ya ha conocido más de nosotros a través de palabras pronunciadas casi en trance, podrá confirmar nuestras dolencias a través de la sabiduría de sus dedos. Es un masaje con una técnica mexicana, preciso, rápido y diferente.
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Despues de una bebida refescante y que repone sales en nuestro cuerpo, Norma nos explica que hay varios tipos de temazcales. Me han llamado la atención el del Guerrero, que supongo es el mejor para templar el espíritu, pero también hay cosméticos y terapeuticos.
La mercadotecnia ha llevado los temazcales a algunos de los hoteles boutique más importantes, pero la experiencia solo puede ser completa y original si se realiza al ras de la tierra. Por razones ecológicas ya no se debe usar la leña para calentarlos. Así se hacía en tiempos prehispánicos, pero los temazcasleros sembraban cientos de árboles para reponerlos. Ahora es casi mposible.
La tradición del temazcal está en riesgo. Sus propiedadades ya son reconocidas por universidades como la de Chapingo, el Instituto Politécnico Nacional y la UNAM. Quienes manejan este conocimiento, como es el caso de Norma tienen invitaciones de todas partes del mundo para llevar la enseñanza.
El temazcal es la más democrática de las experiencias. El costo es tan alto o tan bajo como el deseo de cada persona de aprovecharlo. Hay un compromiso: devolverle a la tierra de alguna manera, lo que nos presta para nuestra salud física y mental.
Si quieres conocer más te invito a pedir una reservación en habitat@paradigma.org.mx, isabel@paradigma.org.mx o a visitar en facebook la página cihuatecolotl.
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| En América hay diversos tipos de temazcales, este, del sur del país, es del tipo del utilizado por la temazcalcihuatl (terapeuta en términos occidentales) Norma A. Policarpo |
También puedes preguntarle a Isabel, alumna de la Temazcaciihuatl Norma, en el teléfono 5255333-004-07 o por skype en Paradigma TV.
